En el penúltimo apartado del Plan Estratégico del Turismo Idiomático, uno de los más importantes del documento, como se infiere de su encabezamiento, los autores han optado por definir los objetivos del proyecto que son consecuencia del análisis llevado a cabo en capítulos anteriores.

En esta sección vamos a encontrar que los fines se organizan en torno a tres ítems fundamentales: los objetivos propiamente dichos, las directrices de marcado carácter transversal y la líneas estratégicas a desarrollar.

Para tener una idea más completa del apartado de metas del plan, vamos a citar aquí íntegramente el que se ha definido como objetivo general, que no es otro que el de

incrementar los niveles de innovación y competitividad internacional de todos los agentes implicados directa e indirectamente con la actividad del turismo idiomático, apostando tanto por la innovación tecnológica en la gestión y en la comercialización, como por el conocimiento como herramienta de detección de necesidades y tendencias futuras, para poder diseñar de una forma eficaz actuaciones y proyectos de carácter innovador adaptados específicamente a las necesidades del turismo idiomático.

Lógicamente, este fin principal se desglosa en el documento por medio de objetivos específicos de prioridad alta y media.

Las directrices transversales conforman el segundo apartado de este capítulo y, como se puede observar en uno de los diagramas publicados, se basan en cuatro pilares básicos: innovación y tecnología, impulso empresarial y rentabilidad, calidad integral y cooperación y coordinación.

Curiosamente, las líneas estratégicas también son cuatro organizadas en torno a la excelencia empresarial, la formación, la promoción y comercialización y el producto.